
Conferencia-coloquio: “Vivir Tierra Santa”
Por Pedro González, franciscano Comisario de Tierra Santa
Martes 1 de abril, 19:30 h.
Espacio Ronda Madrid
Entrada libre, opción de inscribirte en este enlace
Pedro González (Valladolid, 1946), con más de 50 años de servicio sacerdotal, es, posiblemente, el franciscano español más mediático de Tierra Santa. Con más de 200 viajes liderando grupos de peregrinos hasta reunir a 8.000 personas en 16 años. En 2007 le destinaron a una tarea muy concreta: llevar peregrinaciones como franciscano, sacerdote y guía espiritual. Once años después, en 2018, le encomendaron definitivamente la Comisaría de Tierra Santa. Su nueva misión, difundir el amor por este lugar mediante las peregrinaciones y colectas. Con una trayectoria tan ligada a los santos lugares, ha comprobado que para la mayoría de peregrinos que regresan de Tierra Santa, sus vivencias suponen una experiencia inolvidable que cambia vidas. La disminución y amenaza que enfrenta la presencia cristiana en Tierra Santa no es ningún secreto, motivada principalmente por el conflicto entre Israel y Palestina. Las estadísticas no engañan. Según sus datos, en 1948, año del establecimiento del estado de Israel, los cristianos de Palestina eran el 20% de la población. Hoy apenas sobrepasa el 2%. Por eso, entre los objetivos de este franciscano se encuentra detener el retroceso y fortalecer tanto la presencia de cristianos como de la misma Custodia franciscana. Para lograrlo, González asegura que la primera medida es “rezar mucho”, especialmente para que la paz llegue finalmente a Tierra Santa. Junto a ello, también llama a «promocionar las peregrinaciones» y «ser generosos en las colectas y campañas» por Tierra Santa y sus cristianos. También por la custodia y su labor: aunque lo «más visible» para los peregrinos es el cuidado de los santuarios, solo una cuarta parte de los 300 franciscanos se dedica a esta tarea. La mayoría restante se dedica a la labor pastoral en parroquias, colegios, estudios bíblicos y arqueológicos y otros ámbitos como guías de peregrinos o a la atención de enfermos. «No olvidemos que la Custodia está también al servicio de los cristianos católicos locales de Israel y Palestina, Siria, Líbano, Jordania, Egipto, Chipre y la isla de Rodas», explica.